
¿Cómo viven los concesionarios la caída de ventas?
Es un desastre sin paliativos. El mercado está totalmente plano. De hecho, se puede decir que no hay mercado. La gente se ha quedado paralizada por falta de confianza por todo lo que está pasando. Nos ha bajado el tráfico de visitantes a las exposiciones brutalmente, que se encuentra en mínimos históricos.
¿Se imaginaba que los coches eléctricos iban a superar a los diésel tan pronto?
Para nada. Ha sido un asombro total y absoluto. Y eso que ahora estamos con plazos de entrega de coches eléctricos que superan a los de combustión, en lo que influye más la escasez de semiconductores y, sobre todo, los problemas de suministro de cableados que venían de Ucrania y Rusia.
¿Sigue habiendo largas esperas para los coches nuevos?
Progresivamente se están acortando en el caso de los térmicos, que vuelven a plazos razonables aunque siguen siendo más largos que los que estábamos acostumbrados antes de esta situación. Ahora mismo estamos en tres o cuatro meses en los coches diésel y gasolina y de seis meses a un año en los eléctricos.
¿Influye la Zona de Bajas Emisiones en Pamplona en el tipo de vehículo que se demanda?
¿El comprador sigue confundido con la cantidad de tecnologías?
¿Qué suele buscar un comprador actual de coches?
La mayoría empieza preguntando por el eléctrico. Quieren conocer sus virtudes y defectos. No obstante, acaban adquiriendo coches híbridos o gasolinas debido al elevado precio de los vehículos de baterías en comparación. El que está perdiendo la batalla es el diésel y el resto de tecnologías, como los de gas o los de hidrógeno, es muy residual en ventas. El híbrido enchufable tiene éxito entre quienes tienen un lugar para cargar, ya sea en casa o en el trabajo, y el no enchufable entre los que dejan el coche en la calle.